ONE LOVE 12.- LLUVIA FRÍA
AUTOR: Annis Torres Lyton a.K.a. Jenny Ya
COUPLE: Se7Yang, DaeRi, TopG
CLASIFICACIÓN: +14, Drama, Angst. Romance.
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CAPÍTULO 12.-LLUVIA FRÍA.
Mi abrazo es una fortaleza para ti, pero otros me están alejando
Amor, siento temor al no poder ver el final de este oscuro túnel
Se siente como un desierto con un sol abrazador,
Como una persona pidiendo a gritos agua
Bésame, mi amor,
Antes de que esta noche termine, apúrate, ven a mi día a día.
DAY BY DAY- T-ara
- ¿Te quieres casar conmigo? –El brillo de esos ojos oscuros era realmente radiante, casi como dos obsidianas, y tan profundas que es fácil perderse en ellos.
Pero Kwon JiYong no puede asimilar, un día antes había visto al actor salir de la oficina de Yang Hyun Suk, confirmando los rumores que circulaban en YG y en los que se decía que tenían reuniones privadas desde hacía semanas. Horas atrás habían estado con Kang DaeSung que permanecía hermético; sus labios no habían dicho nada con respecto a la escenita protagonizada con Lee Hana… y ahora, que se encontraban en una suite, parte de las propiedades del mayor, conversando sobre todo el problema en el que estaban metidos, se le planta con la expresión más seria que le hubiese visto. Suelta su mano, lo cual algo decía que eso era malo, para extraer de uno de los bolsillos internos del saco una pequeña caja de terciopelo, en cuyo interior reluce el brillo de un exquisito anillo Cartier.
- No te enojes… lo he pensado mucho. Sé que no es el momento adecuado, sé qué ha sido mi peor idea al hacerlo ahora que estamos con tantos problemas, pero yo...
JiYong quiere que Choi se calle, no tiene que pensarlo mucho, ya sabe la respuesta.
- Acepto. –Dijo con tono tranquilo.
- Si no lo hacía hoy, no sé si podría tener otra oportunidad… –Los nervios lo habían traicionado, pero entonces un rayo de lucidez llegó.- E-Espera. ¿Q-Qué dijiste?
- Acepto. –Repitió y esbozó una sonrisa, estaba más que seguro de su decisión.- ¡ACEPTO! ¡ACEPTO!
Dios, parecía una quinceañera… era inevitable. Estaba feliz, muy, muy, muy feliz, aunque quizás no debería estarlo, pero en verdad, aquello era lo mejor que le hubiera pasado.
- Ji… ¿Aceptas? ¿Así de simple, sin cuestionar ni criticarme? –SeungHyun tenía que asegurarse que no estaba alucinando.
- Sí, Acepto… así de simple. ¿Por qué tendría que ponerme difícil? Yo solo quiero estar a tu lado de todas las maneras posibles. –Explicó sin borrar la sonrisa.
¡Casado con Choi SeungHyun! ¡Qué locura! ¡Las mujeres arderían de envidia cuando se enteren que se adueña de semejante ejemplar de hombre! ¡Sus padres dejarán de hablarle definitivamente! ¡Al demonio! ¡Quería estar enlazado con SeungHyung! ¡Lo deseaba! Llevaba mucho tiempo esperando eso, desde que en sus manos se posara la invitación de la hipócrita boda de DongWook y HanByul.
- ¿Estás seguro de querer emprender un juicio para que nuestro matrimonio tenga validez? ¿Sabes qué esto se pondrá peor?
- Sobre eso, Seung… -JiYong se puso serio para desgracia del mayor.- ¿Podrías esperar? Yo quiero casarme contigo, pero… quiero hacerlo cuando Seungie despierte. Yo quiero pelear sabiendo que todos se encuentran bien. Porque sé que Ri-ah despertará.
SeungHyun negó suavemente mientras saca ese anillo y lo pasa por el collar que tiene; es un anillo-dije, de “Amor secreto”, como lo era su relación. La cadena de finos eslabones termina rodeando el cuello de JiYong que no entiende nada de sus gestos.
- Yo nunca me opondría a ese deseo tuyo. Te amo. Quiero pasar el resto de mis días a tu lado. Esperaré el tiempo que sea necesario, porque al fin me has aceptado como tu compañero, como tu pareja ¿Qué más da esperar para formalizar legal y públicamente lo nuestro? Somos una familia, después de tanto tiempo juntos, los cinco somos una familia. Y para mí la familia es sagrada, por tanto. Yo también quiero que el día de nuestro enlace, estén nuestros otros tres hermanos. -Una sincera sonrisa se dibuja, el oro y el platino resplandecen, brillan como indicando que el portador ya pertenece a alguien, y ese alguien pertenece al portador.
- Seung… -Lo abraza, se aferra con todo su ser.
Silenciosas lágrimas se deslizan lentamente.
- Gracias, gracias por entenderme. Haré todo por ser el mejor compañero de vida para ti. Daré mi vida en hacerte feliz.
- Gracias a ti… Por aceptarme. Gracias por ser mi futuro esposo.
El mayor escondió el rostro en el hombro, no pudo continuar reprimiendo las lágrimas de felicidad. JiYong era suyo, suyo y de nadie más. Ahora estaba completo.
No hubo cenas con velas ni rosas como sería la costumbre… Seung podía ser un completo romántico, sin embargo, por el tiempo que llevaba junto a Ji había comprendido que tanta “cursilería” ponía de malas al otro. Y ese evento era especial, para ambos.
Para “SU” compromiso, lamentablemente celebrado por ellos dos porque el resto estaba esparcido entre USA y Kang ocupado con el escándalo suscitado… una botella de vino que tan celosamente Choi había guardado y tenía la fama de ser “único” en su especie, terminó vacía junto a un par de copas de cristal fino. La situación hacía que el acontecimiento tuviera un sabor agridulce… no obstante, tenían que festejarlo; no todos los días se reciben propuestas de matrimonio.
Sobre un majestuoso sofá que sabrá Dios cuán antiguo era, sus cuerpos entrelazados miraban el paisaje de la nocturna Seúl que les regalaba una enorme ventana de ese último piso, la música a tono bajo que habían puesto creaba un momento especial, así, sin cruzar palabra, gozando en silencio. No había deseos desenfrenados, porque siempre se entregaban cuando la oportunidad se presentaba… era extraño, parecía una de las tantas noches en que se reúnen, pero al mismo tiempo era “mágica” por el sencillo hecho de que una promesa se había efectuado de la forma tan íntima como habían soñado.
Por un lado, fue sorpresiva… Ji estaba tan sumergido en los problemas de otros y el trabajo, que no vio venir el plan de su pareja. Y por el otro, fue perfecto… el actor, estaba orgulloso de sí mismo por el valor que finalmente reunió para dar el paso más importante.
Esa noche no existía nadie más que ellos, esas horas eran suyas, solo suyas, les pertenecían. Mañana ya habría que pensar en el mundo… mientras, en ese presente, se lo dedicaría el uno al otro. Dejarse vulnerable para recibir esa recarga de energía llamada amor, antes de volver a la dura vida que les aguarda. JiYong se aferra a Seung con sus brazos, se vuelve para mirarle, quiere reflejarse en esos ojos, quiere encontrarse en ellos para sentirse seguro de que solo le miraran. Pero cuando el otro sonríe cálidamente mientras le sujeta el mentón, una enorme felicidad y fuerza se instala en su pecho esparciendo sus ondas por todo su ser… es como si el miedo mismo le hubiera abandonado.
- Te amo. –La voz ronca del más alto susurra pasivamente.- Te Amo, Kwon JiYong.
Sin poder hacer algo al respecto, las mejillas níveas se tornan poco a poco rosas, luego se coloretean en rojo granate, no le desvía la mirada como en veces anteriores, cuando Ji tenía miedo de sus sentimientos, al contrario, mantiene la mirada con la penetrante pero gentil, no oculta el rubor… se acerca para rozar los labios perfilados que soltaron tan maravillosas palabras.
- Yo, también Te Amo… Choi SeungHyun.
Lo siente sonreír, hacer feliz al mayor es relativamente fácil.
- Volveré a YG Entertainment. –Anunció repentinamente.
- No lo hagas por mí, Seung… -A Kwon se le bajó la emoción.- No tienes por qué hacerlo si no quieres.
- Yo quiero. –Respondió.- Y ya firmé… se hará oficial en unas semanas, justo cuando terminen las promociones que tengo, mi primer trabajo será una cinta, después, grabaré mi primer disco.
- Seung… fuiste tú, quien dijo que deberíamos tomarlo con cuidado. Yang no es de fiar, y…
- Shhh… -Un dedo se posó sobre esos labios de terciopelo.- Ya lo hice, amor. No hay marcha atrás, además… con DongWook manejando la agencia de Bae, podemos llegar a un acuerdo para un reencuentro del grupo.
Ni siquiera había ganas de discutir sobre ese asunto, al que inexplicablemente a JiYong comenzó a inquietarlo. Una extraña ansiedad se apoderó de sus pensamientos y provocaban imperceptibles escalofríos… Era, era como un mal presentimiento…
Un beso más que se llevó las cavilaciones a un retomo lugar. Cerró los ojos abandonándose a la calidez que le brindaban los brazos de su prometido. En algún momento, todo fue paz.
- ¿S-Seung…? –Ji frunció el ceño cuando estirando una mano al lado contrario de la cama no encontró un cuerpo con el cual toparse.- ¿Seung…?
Se incorporó ante el silencio, la luz se filtraba sin fuerza. Al parecer fue debilitada en las capas negras de la ventana, más las espesas cortinas europeas… se encontraba solo, y eso no le gustó al productor. En el buró de su lado vio el móvil que increíblemente no tenía ni llamadas ni mensajes de trabajo.
- Seung… -Llamó nuevamente.
Dejó la cama con pereza, suspiró… había pasado la noche en la suite del actor y este, ni daba señales de estar en la estancia.
- SeungHyun…
El baño estaba vacío, se dirigió a la sala esperando verlo frente a la enorme pantalla pero tampoco estaba, la cocina estaba vacía…
- Choi SeungHyun, no es gracioso. –A Kwon le desagradó escuchar el eco de su propia voz.
¿Dónde estaba Choi? Se acercó unos pasos a la terraza y el balcón, pero tampoco lo encontró.
- Seung… ¿Dónde estás?
Un sordo silencio le rodeaba, un aura pesada comenzó a estresarlo, las paredes eran frías, la soledad no le gustaba… se sentía extraviado; como estar en un mundo desconocido, una dimensión paralela y él estaba ahí, entre muebles antiguos… pero completamente solo.
- ¡SeungHyun!
El pulso se aceleró, ese corazón enamorado se estrujó con desesperación. ¿Por qué estaba solo? ¿Dónde se encontraba Seung? ¿Por qué la fría soledad? Quería que parara, quería ver la figura del actor.
- S-Seung… por favor…
Una sensación de terror le envolvió en la paranoia, creía que enloquecería si el otro no aparecía pronto. Al bajar su mano al pecho donde su corazón latía ansioso descubrió el anillo-dije Cartier, lo sujetó con fuerza y se obligó a tranquilizar su agitada respiración mediante repetidos ejercicios de inhalación-exhalación profunda, temblorosamente tomó el móvil e iba a marcar el número de SeungHyun cuando escuchó ruido en la sala, sin pensarlo fue allá.
Y en sí, la calma volvió a su alma al verle atravesar la entrada con un par de bolsas en mano.
- ¡Choi SeungHyun! –Exclamó desahogando su tensión acumulada.- ¡¿Dónde estabas?! ¡Demonios!
El aludido se encogió recibiendo la represalia con una sonrisa traviesa, cerró la puerta activando la seguridad y lo tomó entre sus brazos en un movimiento veloz.
- Buenos días, Futuro Esposo. ¿No me regalas un beso?
- Choi… -El otro lo fulminó con la mirada.- ¡Responde! ¡Y bájame!
La ronca pero afable risa del otro resonó ante el silencio que imperaba su morada de lujo.
- Vaya humorcito tiene mi futuro esposo… -Parecía un niño provocando a una pequeña criatura.- ¿Qué fue lo que interrumpió el sueño de mi hermoso prometido?
- ¡Seung, bájame, ya! –La paciencia estaba agotándose, cruzó los brazos cuando sus pies tocaron el suelo.
- ¿Qué ocurre, Ji?
- ¡Ocurre que despierto y tú no estás! ¡Te busco por todos lados y no te encuentro! ¡Estaba solo en tu suite como animal abandonado! ¡Tuve miedo! –Conforme fue soltando los reclamos, al ser consciente de lo último se quedó callado. Para su desgracia, Choi le había escuchado y le mirada sorprendido.- Y-Y… Y-yo…
Ni cómo arreglar, las palabras salieron inconscientemente. Se maldijo mentalmente mientras el otro depositaba las bolsas sobre una mesa y se acercaba a él con un semblante serio.
- Fui por el desayuno. El lugar está cerca, no tardé más que diez minutos… por eso no dejé nota y cómo estabas profundamente dormido pensé que no despertarías hasta tarde. Sobre todo porque en la madrugada estabas muy inquieto entre sueños. –Explicó abrazándolo fuertemente.- ¿Qué tienes Ji? ¿A qué le tienes miedo? ¿Es por nuestro compromiso? ¿Tienes nervios? La boda será en meses o un par de años.
¿Qué era…? ¿Por qué ese terror? ¿Por qué esa tristeza? Inesperadamente un par de lágrimas se deslizaron, un nudo en la garganta… ¿Estaba algo mal en él? JiYong rompió en llanto.
El actor se mortificó, por más que a velocidad relámpago repasaba mentalmente, no hallaba motivo alguno que haya hecho para poner a JiYong en tal estado emocional. Le dolía verlo así, y se frustraba no saber cómo detenerle. El otro lloró en su hombro, temblaba ligeramente. Choi lo abrazó casi al punto de lastimarlo, continuaba sin comprender.
Kwon solo lloraba, era una mezcla de agotamiento, de felicidad, de enojo, de mortificación, pero sobre todo de un terror imperceptible que logró colarse en su corazón de manera mortífera.
Los minutos fueron pasando, el confort que brindaba el calor del cuerpo de Seung convenció paulatinamente a sus inseguridades que todo estaba bien y no debía llorar como un chiquillo.
- Te prometo que no volverá a pasar. Te llamaré la próxima vez o te dejaré un mensaje de voz. Lo siento, lo siento mucho… -Escucharle disculparse se hizo sentir culpable.- Perdóname, Ji… no fue mi intención.
- S-Seung… yo… -¡Maldita sea! No podía articular palabra, ver el rostro perfecto de su prometido preocupado solo le puso peor.
La mano gentil que limpió las mejillas, ofreció un pañuelo. Y entonces lo descubrió…
El motivo de su terror…
¿Realmente sería feliz a lado de su ser amado? ¿Merecía toda la dicha que se le otorgó desde la noche anterior? Porque el sufrimiento de YoungBae fue realmente agonizante, una y otra vez fue roto ese corazón… y por otra parte, DaeSung y SeungHyun menor, era la peor desgracia…
Y si recordaba a otras parejas como las suyas, conformadas por dos hombres… a la gran mayoría, les aguardó un terrible dolor. Era como si el destino se ensañara con ellos, era como si por su “amor” fueran condenados…
Esas inseguridades que lleva arrastrando del pasado estaban ahí, en ese momento. No era tan fuerte como Bae… y ya ni se diga como Dae, si estuviese en una situación como la de ellos, simplemente se rompería. Porque no concebía la vida sin Choi SeungHyun.
- No te dejaré. –Se quedó en shock al escuchar eso. ¿Cómo le hacía Seung para decir las palabras perfectas en el momento perfecto?- JiYong, no te dejaré. Jamás…
Intentó sonreír, intentó hacerle creer que todo estaba bien, pero mentirle a esas alturas suponía algo estúpido, Choi le conocía por completo. Asintió débilmente, avergonzado por sus emociones sueltas, comenzó a estrujar sus dedos nervioso… ¿Qué clase de pareja sería si continuaba con la paranoia y las inseguridades? Solo sería una molestia, o una carga. Quizás se cansaría de él y lo abandonaría… y ahí, iba de nuevo, haciéndose ideas tontas, haciendo conclusiones basadas en fantasmas.
- Lo siento. -Intentó disculparse, no tenía cara para verle a los ojos. Su reacción había sido exagerada.
- Ahora estamos COMPROMETIDOS. No voy a dejarte, ya eres mío… así como yo soy tuyo. ¿De acuerdo? Sea lo que sea que esté pasando por esa cabeza, deséchalo. –Comenzó a decir seriamente.- ¿Cuántas cosas no hemos enfrentado? ¿Cuántas veces no hemos roto y vuelto otra vez? ¿Cuántas veces no nos hemos lastimado? ¿Cuántos obstáculos no hemos superado? Míranos ahora, aquí estamos, tú y yo. Con una promesa realizada, juntos después de todo.
Sonrió cálidamente, acariciando las facciones de ese rostro. Intentando dejarle en claro al otro que por más irreal que pareciera, y por más motivos que hubiese… su amor, era real. Tan real como el sufrimiento que pasaron, tan real que inclusive el mundo se levantaría enardecido en el momento en que frente a cámaras se diera a conocer no solo su relación sentimental oculta, sino que además, desafiaran las normas establecidas de una sociedad de doble moral acerca de lo que es bueno y lo que no.
Tenía miedo, tanto o más que Kwon, pero al saberse a su lado, al recordar que no estará solo sino tomando su mano fuertemente. Existía la esperanza de que al final del oscuro túnel al que se enfrentarían, había un nuevo camino luminoso, un mundo prometido por descubrir. Así de simple era para Choi, el tener presente que a su lado está JiYong, le da toda la fuerza necesaria y más para asumir el papel de protector que le corresponde. Ahora tenía que hacerle entender al productor, que su posición a desempeñar era exactamente la misma que la de él. Son una pareja, la debilidad y la fortaleza del otro. Si permanecían unidos, todo estaría bien.
- Amor, es hora de desayunar. Ambos estamos agotados, debemos reponer energía. Vamos. –Besó la cabellera rubia, el menor había optado desde un par de años por la gama de claros y rubios.- Ji… estás bajo de peso.
Quizás la inseguridad se vio mitigada por las valiosas palabras sinceras que Seung le dijo, pero el temor no desaparecía. Y se negaba a separarse del mayor. Sus brazos se aferraron más a la figura contraria.
- ¿Quieres qué te lleve a la mesa en brazos? Seung tortuga llevará a Ji concha.
El rubio sonrió con la sola mención de sus apodos. Amaba tanto a SeungHyun que dolía.
- Te Amo, tortuga lenta.
- Yo te Adoro, mi preciada concha.
Choi frunció el ceño al tomar entre sus brazos el cuerpo de Kwon, el peso del cuerpo fácilmente pasaba por el de una modelo. Ligero. Tan frágil… ¿Podría soportar lo que se avecinaba?
Sin embargo, así como la preocupación del actor llegó, se disipó < Ji es fuerte. > Recordó.
Después de un desayuno de reconciliación, la pareja tuvo que separarse para realizar las actividades. Acordaron dejar pasar un tiempo antes de volver a acosar a Kang con preguntas de ese pasado que les ha omitido. Había tantas cosas que no estaban claras, y otras más iban surgiendo. Sin embargo, dejarían que regresara a lado de Seung menor, quizás esas visitas le amansen los nervios.
A leguas era visible la necesidad de DaeSung por estar a lado de su durmiente. Eran conscientes, había sido una pesada carga enfrentar a los medios comunicación... quizás, estar junto a su ser amado proporcionaría más ánimos de lucha. Al menos eso era lo que pensaba Ji.
Eso era lo que creía.
- RECUERDO PASADO –
- Me tengo que… ir, hyung. –JiYong era muy joven cuando tuvo que separarse de su hyung favorito. No, no hyung… su mejor amigo, su hermano.
Sus palabras casi salían entrecortadas debido al nudo en su garganta.
Habían pasado muchas aventuras juntos. Logró apartarlo de la pandilla y crearon su propia “manada”. ¡Era tan genial! Solo ellos dos.
Sin embargo, la carrera artística que sus padres labraban sin tanto interés, se volvió una prioridad máxima. Estaba dentro de una de las más poderosas agencias de entrenamiento, como todos, su nivel traineer le colocaba al final de la cadena, pero los pequeños papeles que se le asignaron sirvieron para comenzar una fama mediática.
A pesar de todo eso, que era divertido… Kwon JiYong había descubierto su verdadera pasión gracias a SeungHyun hyung… la música.
¿Cómo olvidar sus primeros intentos? ¿Cómo olvidar las huidas de sus hogares a altas horas de la noche tan solo para colarse a esos bares donde raperos “Under” se enfrentaban a emocionantes batallas de rimas veloces y ácidas palabras?
Fue en esos lugares que le mostró Seung, donde Ji descubrió su lugar en el mundo.
Desde ese momento, y siempre a lado de SeungHyun hyung emprendió el intricado camino hacia la música. El Hip-Hop al principio era una moda extraña que fueron adoptando… podía notar que su hyung estaba evolucionando en cuanto a la lírica. Decidido y aferrado al sueño de ser rapero.
Era exactamente el mismo deseo que sentía en su pecho... lo había hecho saber a sus padres, que al principio no toman en consideración, claro, hasta que ese sumbaenim de la agencia a la que había pertenecido hasta esos días y que le recomendó a otra agencia; una especializada también en entretenimiento pero en la que fue acomodado al área musical.
Iba a cambiar de entrenamiento. ¡Sería rapero! Las posibilidades que les dieron a sus padres fueron las mejores que en la otra agencia y aceptaron el contrato, aunque eso requería que tuvieran que mudarse.
- … -El parpadeo le indicó a Ji que su hyung estaba sorprendido por su repentina partida. Y las cejas caídas revelaban una tristeza que hacía mella en su interior. De repente, dolía.- ¿Por qué?
Decir la verdad, decir que lograría cumplir su sueño de ser rapero ahora no le parecía una idea tan espectacular, no al ver que esa persona que tiene el mismo sueño que él… ¿Qué pasará con él?
- Y-Yo… -¿Podría decirlo sin sentir que hería a su hyung?
- Solo dilo, y no me mientas. –La voz profunda le erizó la piel por breves segundos, Ji bajó la mirada. Le había pillado, lo conocía tan bien.
- He cambiado de agencia… -Acercándose al motivo central, se volvía cada vez más pesado avanzar.- Es necesario que nos mudemos. Ahora soy traineer de YG Ent., hyung… comenzaré mi instrucción como rapero.
Cuando terminó de decirlo cerró los ojos apretando los parpados, esperando algún reproche, algún comentario que revelara enojo.
- Eso es bueno Ji… felicidades. –Abrió los ojos para mirarle, ver esos ojos profundos sin atisbo de molestia o decepción despertaron su sensibilidad.- Tienes que hacerlo bien, enano.
La mano regordeta y grande de Seung alcanzó su cabeza y revolvió juguetonamente los cabellos. El mayor no captó su reacción ante esas palabras de aliento; estaba alejándose, entonces Choi lo abrazó con fuerza.
- Tienes que hacerlo bien, o me enojaré de verdad. YG Entertainment es una agencia Cool. Ahí están Perry-sshi, Jinu-Sean-sshi… y más. ¡Demonios! Siento envidia, pero también quiero que lo logres. Quiero verte rapeando con ellos.
El corazón del menor se estrujó. Era un dolor y un alivio. Un miedo y una paz. La risa de Seung lograba que una calidez se esparciera.
- H-hyung…
- Hey! No llores. –Solo cuando los dedos de Choi tocaron sus mejillas con tierna brusquedad, Kwon fue consciente de su llanto.- Los hombres solo lloran por cosas importantes.
- No quiero dejar a Hyung.. –Explicó mientras se tallaba los ojos y golpeaba al mayor con su brazo.
- Yo tampoco, pero no es algo que se pueda evitar ¿cierto? –Soltó como si estuviera hablando de cosas irrelevantes.- Si tienes que irte para ser rapero, te irás y punto. No hay más.
- ¿Y hyung?
- Estaré bien… no creas que por tomarme ventaja me pienso rendir. Seré rapero Ji, no sé cómo lo haré, pero lo lograré. –Sí, los ojos intensos de Seung estaban dejando ver una melancolía, pero al mismo tiempo irradiaban firmeza.- Además, no es como si nos separáramos para siempre. Existen los móviles, los correos… y puedo irte a visitar. ¡Trabajaré y ahorraré dinero!
- ¡Hyung!
-FIN DEL RECUERDO-
Ji dejó los controles de mando, ¿Por qué había recordado eso? Sonrió con añoranza. En esa época todo era tan diferente. Esa despedida en verdad había dolido y era un chiquillo.
Se hicieron la promesa de mantenerse juntos sin importar la distancia. Durante los primeros meses se las ingeniaron para mantenerse en contacto, sin embargo, poco a poco la brecha les fue alejando.
Medio año después, las llamadas eran esporádicas, el correo se acumuló en ambas bandejas con cartas sin leer y sin responder. Aquellas visitas que tanto esperaba comenzaron a ser desplazadas; si no eran sus horarios, era el empleo de Seung… inevitablemente, los cambios sucedieron.
- RECUERDO -
- Ya no quiero que frecuentes a Choi SeungHyun. –Su madre un día le llegó. Transcurrieron un par de años desde esa despedida.- Se ha involucrado con gente peligrosa y mala. Hijo, debes concentrarte en tu carrera. Me gusta más que estés con YoungBae.
Esa misma noche llamó a Seung, necesitaba escuchar su voz. La última llamada había sido el mes pasado.
~ ¡Yongie! Milagro tu llamada. ¿Qué dice la gran YG Ent.? ~La voz profunda estaba extrañamente melosa.
~ Hyung… ¿Estás ebrio? ~Un molesto sonido proveniente del lado de Choi afectaba la conversación que intentaba hacer.
~ Solo un poco, Ji. Estoy en la fiesta de un amigo, es DJ. Él me deja subir a las battles sin que pague la cuota de amateur. ~Enterarse de eso preocupó al menor. ¿Cuántas cosas sucedieron y no se habían contado? No sabía que Seung era ya un rapero amateur.
~ ¿Cómo has estado, hyung? ~Continuó.
No hubo respuesta al instante, escuchó sonidos y un <<¡Hey, Tempo! ¿A dónde vas? ¡¿Dejarás sola a la chica que te conseguí por llamar con tu mami?!>> Que logró sorprenderlo. ¿Desde cuándo era llamado “Tempo”? ¿Desde cuándo iba a fiestas? ¿Desde cuándo salía con chicas? Era una parte de su hyung que no conocía.
~ Lo siento, Ji… ¿Qué decías? ~La voz fue más clara, más profunda, más ronca. El excesivo sonido desapareció.
~ Escucho que has estado bien, hyung. ¿TEMPO…ah?
~ Mira tú, ya suenas insoportablemente ladino. Estoy en la Underground… es una clase “especial” Ji, nosotros no jugamos con cámaras… peleamos con palabras. No vendemos una imagen Idol, vamos de bar en bar. Nosotros… ganamos respeto, no compramos prestigio. ~Choi no fue consciente, hablaba como si Ji fuese un contrincante más en lugar de su mejor amigo.
~ Ya veo que la mierda se te subió a la cabeza, hyung. Te llamé para saber si estabas bien, no para que me trataras como basura. Adiós ~Dolido, intentó que no se le quebrara la voz.
~ Yongie va a llorar ¿Ah? Ve con tu amiguito ese… ¿Cómo era? Ah, sí… “YB”, te fue bien con Perry-sshi. ~Intervino.
~ Veo que tienen razón. Has cambiado… te deseo éxito en tu carrera Underground, solo espero que aprendas algo más que insultar a las personas, porque tienes a grandes Hyungs con los que yo desearía estar para aprender sus técnicas. Tienes una gran bocota, Hyung… aprende a cerrarla. ~Al casi borde de las lágrimas alcanzó a colgar. Arrojó el móvil sobre la cama. ¿Por qué le había dicho eso? No tenía idea de lo difícil que la pasaba, no sabía lo que estaba viviendo… ser traineer en YG no era la gran maravilla.
Era estar bajo los pies de superiores, era correr de sala en sala para cumplir los encargos a tiempo y poder obtener una tutoría por parte del artista para quien les encomendaban. Debía soportar las bromas pesadas de sus hyungs de 1TYM, debía soportar la actitud altanera del personal que siempre trataban así a los traineers.
Cierto que sus sumbeanims JINUSEAN eran amables, pero el resto los veían a él y a YB como unos más del montón, y ellos tenían que resaltar, pues cómo les habría dicho DongWook hyung: “En YG, puedes debutar mañana o nunca”.
El ringsong del móvil volvió a insistir, revisó la pantalla, YB no había regresado aún de sus clases, recientemente tenía más clases de vocalización. Al ver que no era su compañero de dormitorio sino Seung. Dejó el móvil.
<< Lo siento, Yongie. Ya no te conviene mi amistad. >> Dolió ese mensaje que descubrió en la mañana. Y aunque lloró, le dio fuerzas para superarse.
¡Era un idiota! ¡Un imbécil! Detestaba a esos “amigos” de Seung que lo habían cambiado tanto. Sin embargo debía traer de vuelta al verdadero Seung y echar a TEMPO.
- FIN DEL RECUERDO –
Ese momento fue único, porque decidió que recuperaría a Seung… al hyung amable y fuerte. Niega mientras ríe. ¿Qué clase de ideas tenía a esa edad?
- ¿De qué te ríes, Ji? –La voz de Teddy irrumpió sus pensamientos.
- Recordaba mi época de Traineer. Todo era tan fácil y nosotros lo veíamos tan complicado. Demonios, complicado es ahora.
- Es complicado porque no fueron honestos respecto a lo de su amigo.
- Sí, sí… lo que digas. –La sonrisa se borró e hizo una mueca de fastidio.- Terminé los arreglos. Llama a Taehyun y a Jenni, ya está la pista.
- Ya lo hice. Entonces me marcho, mi vuelo saldrá mañana. –Se levantó de la silla.
- ¿En serio te vas? Pensé que…
- No te equivoques, estos dos años fueron divertidos, pero estaba retirado Ji. Prefiero mi propio espacio, la tranquilidad en mi estudio que “esto”.
- ¿Qué se supone que significa?
- Mierda. Eso significa. La vieja escuela murió, ustedes junto a 2NE1 valían la pena… después de eso, todo se fue al infierno. Masta Wu.. y todos se fueron yendo. Como ratas abandonaron el barco y lo dejaron hundir.
- ¡Oye! ¿Y yo qué?
- Eres como el capitán… morirás junto a tu nave, con honor. –Encogió los hombros.- Fue bueno ayudarte, cuídate de la prensa.
- SeungHyun regresa a YG Ent., ya firmó… YB está con DongWook y él es socio de la agencia… la empresa de…
- Cuando firmen los cinco y convenzan a Bom de regresar como 2NE1 me hablas. Mientras, no me interesa más trabajar para Yang. Me estafó lo que quiso y yo le robé lo que pude… -Se dirigió a la puerta.- No te estoy abandonando; sabes mi número, conoces mis casas. Cuando me necesites búscame, sabes que vendré a ayudarte.
- Gracias… de verdad. Estoy en deuda contigo, hyung.
- No te pongas sentimental… -Regresó el camino para darle la mano en señal de fraterna despedida.- Más te vale enviar la invitación. Linda sortija, por cierto.
Kwon abrió los ojos impactado por el comentario y la sonrisa burlona de Park Teddy se ensanchó. Sus manos pararon impulsivamente sobre su anillo-dije.
- Jesús, ya sabía yo que su generación sería la perdición de YG Ent., desde que te pillé en las oscuras esquinas de la agencia besuqueándote con sabrá Dios quién, a Bae sufriendo su amor ilícito, y su maknae con escándalos, supuse que revolucionarían todo.
- Como si Perry hyung, Kush hyung, y OTROS no tuvieran “cola” que les pisaran.
- Rumores, Ji, rumores… no todo fue comprobado.
- La investigación por lavado de dinero no fue solo un rumor inadvertido.
El productor comenzó a carcajearse, el más joven enarcó una ceja con superioridad.
- Juego de niños en comparación con cierto video filtrado. Shit, ustedes cuando la arman lo hacen en grande.
- Hyung…
- Me alegro de que al fin dejen sus niñerías y se pongan serios. De verdad… felicidades, JiYong, ambos se lo merecen.
Sonrió con alegría al escuchar aquello. ¡Era la primera felicitación! Sentía una inmensa dicha.
- Cartier… SeungHyung sigue siendo un romántico empedernido. –Luego se puso serio.- Supongo que están conscientes de que no será fácil. Este país sigue y seguirá siendo una caldera de dobles morales. Cuídense…
- Gracias, hyung.
El hombre mayor asintió y salió del estudio cerrando suavemente la puerta tras él. Ji suspiró preocupado… ¡Claro que sabía perfectamente el lío en el que estaban por meterse! Pero, con toda su alma, deseaba estar a lado de Seung.
= RECUERDO =
- ¡Hyung! –GD grita para detenerle. Sus cortas piernas no dan lo suficiente para alcanzar aquella espalda ancha.
- Ji… -La voz del mayor es neutra. Cuando se vuelve, no le mira a los ojos.- Gracias por todo, siento haberte fallado. No solo me contactaste, también me ayudaste a armar las maquetas y todo lo demás.
- Hyung… perdóname tú a mí.
- ¿Por qué te disculpas? Me rechazaron, no llené sus expectativas. No cumplo con el concepto “ideal”. –La mirada baja. Ji sentía terribles remordimientos. ¡SeungHyun hyung había dado todo de sí! ¡Era mejor que la mayoría de esos concursantes! ¡Tenía buena lírica! ¡Tenía experiencia! ¡Tenía prestigio! ¡Tenía reconocimientos!
Y todo ¿Para qué? Para escuchar una sarta de estupideces respecto a su figura y negarle su derecho a formar parte de la agencia.
El menor se sentía la peor escoria, porque fue él quien le insistió a Seung que de por sí estaba deprimido por las trágicas pérdidas de sus amigos, estaba deprimido por el rechazo de su madre. La vida de su hyung era realmente difícil… él labró su camino con sus propias manos… quería ayudarle, animarle, y por eso lo buscó cuando los castings se abrieron. ¡Estar juntos!
Pero al final… lo llevó a una humillación peor. Lo llevó a ese lugar donde le miraban con desprecio debido a su cuerpo e ignoraban su talento. ¡Era el culpable de provocar dolor a SeungHyun! Parpadeó un par de veces, y al final se le llenaron de lágrimas. ¡Algunos espectadores soltaron risitas burlescas!
- ¡Lo siento! Y-Yo no quería… yo…
- Volveré. –Esa voz firme le interrumpió.- Verte llorar por mí, me da rabia. No fue tu culpa. Yo regresaré… por mí, y por ti. No fallaré de nuevo. Haré lo que tenga que hacer.
Ji asintió.
- Te esperaré, hyung.
Choi levantó el pulgar, le miró esa vez y le sonrió. Otra promesa.
- FIN DEL RECUERDO –
¿Cuántas promesas no se habrán hecho? ¿Cuántas cumplieron? ¿Cuántas rompieron? Suspira mientras observa detenidamente cada detalle de ese anillo, luego lo desliza por el largo de su dedo. Luce a la medida. Aprieta el puño para sentir el metal marcando su piel, para sentirlo verdadero… real.
Estaba comprometido con Choi SeungHyun.
- RECUERDO -
- No es nada malo. –Ese hyung le susurra, sujeta delicadamente sus mejillas y lo atrae.
Cierra los ojos dejándose llevar por la sensación embriagante. La cercanía, así como la oscuridad del lugar despiertan cierta adrenalina. Su corazón se agita al sentir los labios extraños sobre los suyos.
- ¿J-Ji…Yong? –A mitad de ese extraño pero excitante beso, una terriblemente conocida voz ronca rompe el momento.
Por inercia se aleja del hyung empujándolo con las manos. Limpia la boca con la manga de la sudadera que lleva puesta.
- ¿H-Hyung…? –Sus ojos se abren, escanean la figura… por un momento creyó que era… SeungHyun. No obstante, el chico frente a sus ojos es delgado, su hyung es de complexión más robusta.
- No te sorprendas, TEMPO. Los niños de hoy ya no tienen consciencia. –Teddy Park rompió el silencio con indiferencia.
JiYong sentía el rostro arder en vergüenza, no solo por lo que decía el líder de 1TYM, sino porque fue captado en un momento bochornoso. Punto aparte… había llamado a ese chico “TEMPO” ¡¿Era el mismo TEMPO?! ¡¿Era SeungHyun hyung?! Quería desaparecer en ese instante, o mínimo regresar el tiempo para evitar que viera la escena.
- Con permiso. –El hyung con el que estaba besándose salió como si nada, liberándose del asunto.
- Bueno, novato. Te he traído ante JiYong, el niño prodigio. Tengo asuntos que atender. –Park no esperó respuesta ni nada, solo se marchó.
- Gracias, sumbaenim. –Seung finalmente habló, en respuesta, el mayor levantó el pulgar sin detener su andar tranquilo.
Se miraron largamente. Al sentir el peso de la mirada de Seung que finalmente se desvió, sintió un agujero en el estómago.
- Y-Yo…
- Quería verte porque llevo dentro de YG poco más de una semana y tú no te habías percatado. Inclusive en el comedor, no te has dado cuenta. No podía acercarme… siempre estás con Perry-shi, JinuSean-sshi, Masta Wu-sshi, DongWook-hyung y YB-sshi. –Explicó sin atreverse a mirarle, provocándole dolor. ¿SeungHyun hyung no volvería a mirarle después de haber presenciado aquel beso? Bueno, tenía que admitirlo, era natural que ocurriera.- Has cambiado mucho.
Detuvo la corriente de sus pensamientos fatalistas. Pues al hacer énfasis sobre su cambio, Ji tuvo que hacer la observación debida.
- Mira quién lo dice, hyung. –Quiso reír ¡Estaba completamente cambiado! ¡¿Cómo esperaba que lo reconociera si su apariencia era realmente distinta?! ¡Era delgado! Meses atrás había sido más corpulento.
Al instante en que los profundos ojos de Seung se posaron en los suyos, Ji se vio desarmado.
- Lo siento… -Comenzó a decir.- Por mis palabras, por no haberme dado cuenta de tu presencia… y por lo del beso.
- No es como si fuera a odiarte o algo… aunque debo admitirlo. Fue extraño verte besar a un hombre.
- Fue muy vergonzoso. ¡Lo siento! –Le tocó bajar la mirada.
- Lo mismo digo. –Acordó.- ¿Es… tu novio?
- ¿Ah? ¡No! De ninguna manera.
- Entonces ¿Por qué se besaban? ¿Eres gay?
- ¡Hyung!
- ¿Qué..? Solo quiero saber. Digo, eres realmente raro… me superas.
- Y-Yo…
- Ven aquí, enano… -A pesar del momento traumatizante, Seung seguía siendo Seung. Actuaba como si nada.- Enséñame el lugar.
La sonrisa tranquila del mayor le alivió la angustia. Quizás no hacía las cosas debidamente, pero conocía la vergüenza. Estaba más preocupado por la estabilidad mental de su hyung. Tenía que dejar las cosas claras.
- Hyung… yo…
- Dejemos el asunto ¿De acuerdo? No puedo asimilarlo… es decir… esa escena fue un tanto shockeante. Así que mejor dejemos el asunto por la paz.
No muy convencido por esa propuesta asintió, porque no tenía qué recriminarle a Choi.
- Te lo mostraré todo.
- FIN DEL RECUERDO –
El fin de una larga y extenuante jornada laboral sobre todo por esas fechas de un nuevo año. Una parte de él quería tan solo perderse entre los brazos cálidos de Choi que se encontraba realizando sus actividades agendadas, ahora que oficialmente regresaba a YG. Sin embargo, su otra mitad no quería ver el calendario, ni asomarse a ver el ambiente navideño, ni nada…porque su corazón sopesado por la desdicha le recordaba que no estaba Ri-ah ni DaeSung juntos; esas dos personas tan importantes para él estaban separadas por el maldito destino. Con la Fe de un niño esperaba realmente que Kang estuviera a lado de Lee, aunque dentro sí mismo existía un mal presentimiento. La navidad dejó un sabor agridulce, porque a pesar de haber permanecido la noche de navidad y el año nuevo con su prometido, a pesar de haber sido frecuentado por amigos y familiares… a pesar de haber recibido una video llamada con YB y Dongwook… no estaban juntos, no habían sido cinco hombres.. otra vez. Esa necesidad de tenerles a su lado nacida desde que tuvo conocimiento del coma del menor de todos crecía cada día más. La vida es impredecible, no sabes cuándo será el último momento en que lo verás.
Aunque estaba agotado, no lo admitiría… porque entendía que lo necesitaban completo, fuerte y sereno para afrontar con firmeza la avalancha de inconvenientes.
Pero cuando las situaciones descaraban su escudo, el mejor remedio para el productor era pensar en SeungHyun. El solo evocarlo en su mente le llena de paz. Y también de muchos recuerdos mezclados de felicidad, dolor y miedo.
- FLASH BACK –
- No es nada malo. –Susurra a un completamente ebrio SeungHyun, al igual que el mayor se encuentra sumergido en el alcohol y sea lo que sea que les hayan dado a fumar. Siente el cuerpo ligero, el corazón libre y la mente en algún perdido lugar.
No obstante, era consciente de lo que estaba a punto de hacer. Sus manos se han encandilado con la suavidad de las mejillas de Choi finamente afeitadas, la colonia droga sus sentidos y sin más remedio se ve obligado a eliminar las distancias entre sus rostros… lo besa.
Al principio, como todo que tiene su primer contacto, el tacto es suave… sin embargo, se vuelve un beso asfixiante, los dientes chocan con cierta ansiedad debido a la falta de acoplamiento, pero aún con eso, la emoción que aflora en sus pechos es compartida.
SeungHyun no hace algo al respecto más que corresponder el beso. Continuar el intercambio de mordiscos, saliva, y excitación. No se encuentra lo suficientemente lúcido como para entender lo que ocurre a su alrededor.
Kwon ahogó un gemido de placer puro al sentir sobre su cintura las cálidas manos de su hyung. Un infierno carnal fue evocado desde las desconocidas profundidades de su ser.
- FIN DEL FLASH BACK –
Sí, así había comenzado… torció su relación gracias a una juerga, y esos estúpidos impulsos adolescentes de experimentar su sexualidad.
Cubrió su rostro con las manos, avergonzado, había actuado de manera egoísta, de manera inmadura. No le había importado el daño colateral que podría causar no solo a su amistad, sino a Choi.
La mitad de su consciencia aún sentía remordimientos, la otra parte, reía con esa felicidad melancólica que produce un recuerdo agradable, puesto al final ¿No lo logró afianzar un compromiso amoroso con el mayor? ¿No logró encadenarse a él hasta que ambos se pertenecieran? Sí, pero acosta de bastantes discusiones, reproches, heridas.
Primero fue un beso, posteriormente vinieron más y más… sin que nadie sospechara, ellos tenían “algo” especial. Durante el proceso no supieron cómo nombrarlo, hasta demasiado tarde, cuando ninguno podía ni quería echarse para atrás; Amor.
El amor y el dolor estaban estrechamente unidos, tanto como el amor y la locura. Pero ellos no lo habían vivido en carne propia, por ello, tuvieron que atravesar un siniestro camino.
- FLASH BACK-
¿Era tan aborrecible lo que hacían? Se preguntaba mientras veía vestirse a Seung.
Aquello que habían estado haciendo por tercera ocasión era realmente glorioso. Jodidamente glorioso.
Si bien producía cierta aprehensión, tan solo al inicio del acto. Luego todo se borraba, la mente quedaba en blanco, creía que flotaba y las sensaciones le eran muy agradables.
Entonces, ¿Por qué después de culminar aquel maravilloso acto lo rebasaba la culpabilidad? ¿Por qué tenía miedo de esa espalda que saldrá por la puerta? ¿Por qué después ya no quería verlo? ¿Por qué los labios le sabían amargos cuándo minutos antes eran dulces? ¿Por qué sentía la piel sucia cuándo antes ardía en placer? ¿Por qué la esencia le producía asco, cuándo él mismo le había pedido que se vertiera en su interior?
¿Por qué cuándo se voltea y le mira con cierta tristeza, deja los labios entre abiertos sin soltar lo que iba a decirle? ¿Qué será lo que SeungHyun-ee quería decir? No había respuesta, porque el más alto tan solo sale de la habitación.
Al ver la puerta cerrada, una rabia incontrolable le quema el pecho. Arroja las almohadas contra la misma, simulando que el blanco en realidad es su “mejor amigo”. Es justo el momento en que se percata que ha arruinado su amistad ahora que intimidan y no queda más que continuar hacia adelante para no perderlo.
¿Se entrega a él por placer o para tener algo verdadero que los vincule?
Su cabeza duele. El corazón también… es por ello que al dejar la cama donde han intercambiado pasiones, sin mirar atrás, se abandona a los delicados brazos de una fémina, después de todo, su dulzura cura todo mal de amor.
La mente burbujea en esa persona aún cuando invade el reconfortante interior, aún cuando escucha perfectamente su nombre entre gemidos sublimes… solo puede pensar en ese momento en que las manos proporcionan caricias ásperas, la rasposa voz que se desliza por su oído y su piel… cuando explota de éxtasis al sentirlo fundiéndose dentro de su cuerpo.
Nuevamente la culpabilidad golpea su estabilidad, le deja perturbado… más el orgullo le mantiene firme.
- JiYong. –Todo su ser se estremece reconociendo el llamado de esa voz grave. Empeora al enfrentarle.
Él ha visto cuando despide a su acompañante, efímera, de su apartamento. Algo en su interior se quiebra. Él vio a esa extraña señorita que suele ayudarle a olvidar… se avergüenza como un niño descubierto en plena travesura.
Muchos pensamientos cruzan su mente, pero ninguno retrató perfectamente el momento en que vuelve a ver la espalda ancha… y se aleja a pasos tranquilos.
Quiso detenerle, más sus emociones lo bloquearon. Quiso ir tras él, pero ¿Para qué? ¿Qué iba a decir? ¿Cómo iba a reaccionar? Sintió terror de un desprecio, se acobardó… y ese día, el gran Gdragon lloró, sin entender el agujero negro instalado en su pecho, sin comprender la angustia de un futuro incierto.
¿Había perdido a SeungHyun? ¿Qué significaba Seung para él?
Fue de esa manera en que le dieron la bienvenida al purgatorio.
La jodidamente gloriosa sensación se transformó en un círculo vicioso de lujuria-culpa-odio-miedo. Ninguno habló sobre el asunto, continuaron como si nada hubiera pasado. Sin embargo, aquella camaradería se fue enfriando, los juegos se volvieron plásticos… las sonrisas eran falsas. Lo único verdadero que tenían, ocurría en una habitación, sobre una cama. El resto, tan solo era el fantasma de lo un día fue.
¿Cuántas amantes?
¿Cuántas novias?
Ambos se empeñaron en echarse tierra, en atacarse sin mirar las heridas que les salpicaban el alma. Aún con ello, ninguno se detenía y enfrentaba lo obvio.
El tiempo era un factor que producía mayor agonía… los días, las semanas, los meses… una cuerda que va asfixiando sin prisas ni retrasos.
¿Cuántas veces no vieron al otro besarse con una mujer? ¿Cuántas veces no fueron testigos de la relación sentimental del otro?
Las mismas en las que giraban en la cama, las mismas en que marcaban con mordidas certeras y arañazos furiosos. La misma cantidad en que decían “te amo”, pero se escupían “te deseo”.
Un par de hombres que se negaban a ver la cruda verdad.
- FIN DEL FLASH BACK –
Recordar aquello, angustió a JiYong. Rápidamente abandonó la agencia, tras haber verificado que su prometido se encontraba en casa. Fue en esa dirección…
Al verle abrir la puerta, se arrojó a sus brazos. Lo besó con vehemencia… permitió que el mayor alcanzara a cerrar. Comenzó a desvestirlo con desesperación.
- ¿Pero qué…? ¡Ji!
- Házmelo. –Ronroneó sin detener sus movimientos. ¡Lo necesitaba!
- Tranquilo. –Choi más que excitado estaba preocupado ¿Y ahora qué había sucedido?
- Sé violento… sé rudo. –Deslizó la boca por el cuello ancho. Mordisqueó sin vacilar.
- Yong-ee.
- Y luego… házmelo dulcemente. –Urgía unirse, urgía sentir las embestidas fieras que nunca le dejan de provocar dolor. Un dolor-placer al que es adicto. También urgían besos gentiles, caricias amorosas. Palabras sanas junto a ese “Te amo, JiYong” que tanto adora.
Después de largas horas de pasión… el corazón de Ji se calmó. Fue necesario mirar nuevamente su sortija para dejar atrás su extraño ataque de ansiedad.
Al abrir los ojos ya no veía la espalda de Seung mientras se vestía. Todo lo contrario, estaba ahí, en ese mismo lecho, tan desnudo como él. Dormido.
Sonrió, recargó sin lastimar, el oído sobre el lado donde el corazón late… y una felicidad estremeció su cuerpo entumecido: tum… tum… tum… tum…
Todo era real. Choi SeungHyun es real.
Se aferró a ese cuerpo, lo besó juguetonamente al recordar que le pertenece. Es suyo.
- Te amo, Ji… -El adormilado susurro le tomó desprevenido. ¡Aquello era mucho mejor que el típico “Buenos Días”!
- Hola, amor. –Respondió, se alejó para brindarle espacio personal.
- ¿Cómo te sientes? ¿Estás mejor?
- Sí. –Se ruborizó un poco.- Me siento mi comportamiento.
- Ya estoy acostumbrado. –El más joven frunció el ceño lo que provocó una risa rasposa en el actor. Kwon emitió un siseo molesto.
El mayor robó un beso en los labios, después enterró los brazos al delgado cuerpo del productor y haló hacia su lado, lo estrechó con fuerza.
Permanecieron en la tibia cama por horas, a ninguno le importaba la agenda. Ya pedirían disculpas, aunque realmente no había nada importante.
Al dejar la cama, tomaron una larga ducha, tallaron la espalda del otro… inclusive se pusieron a hacer un desayuno. Ni el frío congelante, ni la nevada que sucedió después les importó. Disfrutaban su momento de pareja; era lo verdaderamente importante.
- ¿Crees que nuestra felicidad sea lo correcto? Es decir, como están las cosas… no sé si sentir esta alegría sea adecuado. Porque Riri… aún está dormido y DaeSung… ¿Es egoísta, cierto? Pero no lo puedo evitar. –Comentó después de tragar el bocado.
- El hombre es egoísta por naturaleza, JiYong.. –Respondió mientras bebe el jugo de manzana.- Aunque me gusta creer que esto está bien, porque debemos estar fuertes para ellos. ¿No lo crees? Si todos estuviéramos hundidos en la tristeza ¿Cómo vamos a salir del embrollo? Además, DongWook y YB también están felices.
- Tienes razón. –Concordó.
Se miraron y compartieron una sonrisa cómplice.
El tema quedó zanjado desde ese momento. Puesto la vida laboral comenzó a tirar de ellos hasta que ambos se vieron obligados a separarse.
Pasaban las mañanas brindándose muestras de amor, después se sumergían en el estrés, solamente en las noches alcanzaban la paz. DongWook y YB telefoneaban seguido, a veces uno de los dos se pasaba el día en el hospital cuidando a SeungHyun menor porque les habían dicho a todos que debían esperar un poco antes de viajar a USA.
- He llamado a la empresa… DaeSung no ha ido. Eso me preocupa. –Seung fue el primero en intuir que algo andaba mal.- Tampoco responde el móvil.
- Quizás está en América. –JiYong intentó alentar al otro.
- Pero YB o DongWook nos hubieran dicho algo ¿O no? –El actor frunció el ceño.- Mañana volveré a llamar, si no, iré buscarlo.
- Pero, Seung… mañana tienes que viajar al otro lado del país para filmar parte de la cinta. Luego ir a Busan a grabar tu video musical.
- No importa, encontraré tiempo, Yongie.
- Para que estés más tranquilo, yo lo busco ¿Te parece?
- Gracias, amor.
Suspiró aliviado cuando al día siguiente, SeungHyun se marchó relajado.
A pesar de su ocupado día en YG Entertaiment, Kwon aprovechó la hora de su almuerzo para escapar a la agencia de los maknaes.
- Lo siento mucho, Señor… el presidente Kang-sshi no ha venido en semanas. –La recepcionista le respondió.
Aquello era extraño, Seung había llamado obteniendo el resultado anterior. Y ahora que estaba en ese edificio, confirmaba lo que le había dicho su prometido… todo sonaba tan… extraño.
- ¿Puede comunicarme con la Señorita Kim? Necesito hablar con ella.
- Por supuesto, Señor. –La joven hizo aquello, telefoneó durante breves minutos que parecieron una eternidad.- La licenciada lo recibirá en la oficina, pase por favor.
Palabras mágicas para Kwon, conociendo la dirección dejó la sala de espera.
Tras caminar varios metros y subir al piso de la planta más alta, llegó hasta el escritorio donde la mujer joven le esperaba.
- Buenas tardes, Señor Kwon. –Aunque le sonrió, no era la típica sonrisa amable.
- Buenas tardes. –Respondió en su tono habitual.
- Por favor, pase a la oficina. –No exigió una respuesta, después de todo, no era conveniente conversar en el pasillo, así que ambos cruzaron la puerta con la leyenda: Presidencia.
Tuvo un “deja vu” al ingresar, por un momento imaginó las veces que llegó a visitar la estancia. Lee SeungHyun exclamaba como un chiquillo desde el otro lado del majestuoso escritorio, pero hoy no está sentado en esa silla forrada en piel; ni tiene la computadora encendida; no tiene el caos de archivos sobre el cristal de la mesa; no tiene el aroma a lavanda; no hay música… no hay vida, tan solo es una fría oficina.
Aunque volvió a sentarse en esa silla que le solían ofrecer y aunque tenía frente a él la taza de café personalizada… creía estar en un lugar desconocido, del que le apetecía marcharse pronto.
- He sido asistente personal de ambos dueños de la agencia. No es desconocido para mí la relación sentimental que hubo o hay entre ellos. Porque más que secretaria, me han tratado como su amiga, han sido generosos y confidentes. –Comenzó a decir la mujer.- Por eso, me atrevo a hacer esto. Señor… las cosas aquí están muy tensas, en cualquier momento puede quebrarse esta agencia. Sobre todo cuando las cabezas no dan señales de su presencia. Así que le pido de la manera más atenta, que haga entrar en razón a Kang-sshi… exhórtelo a que vuelva. No me imagino el dolor por el que debe estar pasando, pero si no entra en sí… agotará el tiempo para acudir a la audiencia y es posible que sea procesado. Hice lo posible por rechazar el acta de demanda, pero los días han pasado. Por si fuera poco, ayer el contador expidió un cheque por liquidación del abogado personal. ¿Entiende? Ha despedido a su abogado.
Esas palabras le tomaron desprevenido.
- ¿Q-Qué..?
- Lo que escuchó… esto es grave. He intentado llamarle, pero no responde, estoy segura que no está en América, pues… -La seriedad de la voz asustó a JiYong que aún no terminaba de asimilar todo.- Él no puede dejar el país, debido a la demanda. También llegó la orden judicial, está fichado en los aeropuertos y puertos.
- Kim… ¿A qué demanda te refieres? –Esa era la pregunta del millón. ¿No se suponía que se había arreglado con los socios de la agencia cuando salió a la luz la noticia de SeungHyun?
- A esta. –La asistente, fue a la mesa y extrajo una carpeta que entregó a Kwon. Éste comenzó a leer pero fue frunciendo el ceño.- La Señorita Lee Hana, hermana del Presidente SeungHyun-sshi demanda al socio Kang DaeSung-sshi por usurpación, fraude y falsificación de documentos… ella cree firmemente que se han aprovechado de la situación de su hermano para robarle. Esto todavía no sale a los medios, pero cuando ocurra, será el fin de la empresa.
No entendía mucho de leyes, la mayoría de los términos eran desconocidos, pero si comprendió lo que le explicaron. Comprendía la gravedad. Cerró la carpeta, regresándola a la asistente.
- Gracias por la información. Por el momento no tenemos la menor idea de dónde se encuentra DaeSung-ah, pero lo hallaremos. ¿Podrías tener listo todos los documentos para mi próxima visita? Consultaré con un abogado de confianza sobre el caso para que nos oriente. No permitiremos que se cometa una injusticia, porque es obvio que Ri-ah dejó todo a manos de Dae-ah.
La mujer asintió sin relajar el semblante severo. Guardó la carpeta.
- Descuide, el papeleo completo lo puedo tener en tres días.
- Me parece bien, quizás yo no venga…en ese caso lo puedes entregar a Choi SeungHyun, él es amigo cercano de DaeSung. –Aclaró mientras se ponía de pie y sintió un peso sobre sus hombros, aquella visita tan solo había dejado desconcierto e impotencia, pero definitivamente llegarían al fondo de todo.- Por favor, que esto no salga de aquí.
- Por supuesto.
Salió con su típica arrogancia, aunque por dentro moría por salir corriendo. ¡¿Qué demonios ocurría?! ¡¿Dónde diablos se encontraba DaeSung?! ¡¿Por qué Hana hacía esa demanda?! Entonces recordó la escenita de aquella vez.
- FLASH BACK –
- ¡Te arrepentirás por esto Kang! –Amenazó agresivamente sin importarle llamar la atención.- ¡Porque ni mis padres ni yo hemos firmado una carta de consentimiento que te dé autoridad sobre Seung oppa! ¡Te demandaré por falsificación de documentos! ¡Te meteré a la cárcel! ¡Porque te aseguro que ganaré el juicio!
- Haga lo que quiera, me tiene sin cuidado. De todas maneras… NO VAN A ACERCARSE A SEUNGHYUN. No lo permitiré. –DaeSung con su fría voz respondió y continuó su camino como si nada, dejando a la ofendida Lee que declaraba la guerra…
- FIN DEL FLASH BACK –
¡Sí! ¡Era eso! ¿Por qué habría actuado así? Mientras abordaba su deportivo recordaba minuciosamente; la bofetada, los gritos, las amenazas… al parecer, DaeSung les estaba ocultando algo importante.
SeungHyun debía saber eso. Aprovechó el rojo de un semáforo para sacar el móvil, iba a marcarle cuando vio la hora. Desistió, ¿Era justo angustiarlo? ¿Por qué el destino no paraba de joderles la existencia? ¿Por qué no todo podía ir bien?
<< Hola, SeungHyun. He ido a la agencia de ellos, Dae no se ha parado en semanas. Hablé con la asistente… amor, llámame cuando tengas tiempo. Debemos hablar largamente. >> Dejó el mensaje de voz una vez que al intentar llamarle dos veces, nadie respondió.
El resto del día fue un martirio para el productor, fue incapaz de atinar en el trabajo. Se le notaba presionado y agotado. Yang decidió darle el día, siendo lo menos que deseaba JiYong, estando en casa solo iba sufrir otro ataque de ansiedad, iba a alimentar su paranoia con pensamientos fatalistas. Se dio un respiro, se comunicó con su abogado de confianza, el mismo que tantas veces les ha salvado el pellejo; pidió una cita dentro de dos días.
Esa noche no pudo conciliar el sueño, esperó como quinceañera a que el móvil sonara, sin embargo eso no ocurrió hasta la mañana siguiente.
- Lo siento, Baby, acabo de escuchar tu mensaje. Las grabaciones se extendieron toda la noche. Apenas nos han dado un receso. –Escuchar la voz de Seung, aunque fuese agotada fue reconfortante.- ¿Qué ha pasado?
- Pasa… que todo está jodido.
- Me preocupas.
- Tu estúpido amigo nos ha mentido, a todos.
- Ji. –Bien, la tranquilidad se fue a la mierda. SeungHyun sonaba realmente preocupado, y él, él estaba a punto de colapsar. Por eso comenzaba a insultar.
- Es la verdad. El idiota se ha ido a meter a quién sabe a qué infierno… mientras, llega una demanda por parte de la hermana de Riri por una supuesta usurpación y falsificación, que no se ha dignado a ver, no acude a la audiencia, están lo sentenciarlo a la cárcel… y por si fuera poco, el muy imbécil despide a su abogado.
- ¿Qué demonios..?
- Es lo mismo que pensé… ¡¿En qué carajos está pensado DaeSung?! Esto es grave Seung, si se llega a saber el pleito legal, acabarán con la empresa de ellos, así como su reputación, y quizás tu amigo quede tras las rejas por años. –Eso no era bueno, para nada.
Un largo suspiro de escuchó del otro lado de la línea.
- La asistente tendrá la documentación para pasado mañana, y también ya hablé con el abogado Shin para que nos asesore. Convenceremos al cabeza hueca de Kang para que acepte que lleve su caso, después todo nos ha sacado de grandes problemas, estoy seguro que hará lo mismo con DaeSung, pero lo importante ahora es encontrarlo y hacerlo hablar. Porque hay muchas cosas que nosotros desconocemos.
- Eres el mejor, baby. Has hecho todo muy bien.
- Por supuesto, soy Gdragon.
No hubo risas ni comentarios graciosos, el momento no era el indicado. Cuando parecía ver la luz al final del túnel se daban cuenta de que estaban realmente lejos de la salida.
- Pronto terminaré de grabar mis partes, me excusaré para ir contigo a recoger el archivo y estar en la reunión que con el abogado. No voy a dejarte solo.
El apoyo del otro le venía como un rayo de luz en medio de la penumbra, eso fue suficiente para reponer la compostura.
- Cuídate, Choi… si enfermas, te juro que me enfadaré enserio contigo y le romperé la cara a tu amigo. –Pudiera ser que la amenaza sonaba juguetona, pero era en serio.
- Enterado, baby. Estaré bien.
Terminaron la llamada debido a una interrupción del lado del mayor, pero Ji no estaba tranquilo, conocía perfectamente a su amado y sabía cómo se ponía cuando se trataba de sus seres queridos.
No le sorprendió que llegará en la fecha mencionada, durante el poco tiempo que tuvo, el productor intentó hallar al maknae, sin éxito, parecía que se lo hubiera tragado la tierra, ya había ido al apartamento de Ri-ah, al de DaeSung, inclusive el apartamento que ambos compartieron… no estaba ahí. Llamó a los conocidos pero nadie supo darle algún indicio de su ubicación.
- Llegaste antes. –Más que afirmación se trató de un reproche.
- Lo sé.
- Descansa, yo voy por los papeles.
- De ninguna manera, voy contigo. –Imposible hacerle entrar en razón.
Así que ambos fueron a la agencia de los menores, directamente fueron enviados al área de presidencia, donde de manera confidencial la asistente les entregó las copias del archivo que tenía. No desgastaron más el tiempo y antes de que despertaran mas sospechas salieron del lugar.
Puntuales llegaron al despacho de su abogado. Conversaron extensamente, mostraron el archivo para que lo revisara. Los minutos en que le vieron leer en silencio fueron muy incómodos, la pareja no podía soportar más la espera, aún con eso tuvieron que ser pacientes. El hombre experto en la materia, les explicó detalladamente lo que había en esas hojas, puntualizó la seriedad y dio las muy diversas consecuencias. Lo importante era como los dos famosos sabían, encontrar al acusado.
- Con gusto yo puedo tomar el caso. Si esta persona así lo desea. –Agregó al final.- Aunque es obvio que hay detalles qué aclarar antes para preparar su defensa.
- ¿Usted cree que esto solo sea un intento de sabotaje?
- Puede ser Yong-sshi…no obstante, con mi experiencia, no debemos descartar la otra realidad.
- No, no creo que DaeSung sea capaz de hacer eso. Es un delito grave. –Seung defendió a su mejor amigo.
- Eso no lo podemos asegurar. Quizás hubo circunstancias, quizás en realidad no hubo nada arreglado y viendo la situación crítica, pagó una carta de poder falsa. La única persona que puede sacarnos de dudas es el propio implicado. –Regresó los documentos.
La pareja intercambió miradas, todo era tan extraño. ¿Qué tanto misterio había entre Kang y Lee? Aún hoy se preguntan realmente ¿Cómo era posible que DaeSung no supiera nada sobre el padecimiento de SeungHyun menor? ¿Y por qué esperó dos meses antes de informarles sobre el estado de coma del menor de los cinco? Las palabras del licenciado abrieron la duda... ¿Y si todo eso fuera verdad? ¿Y si realmente falsificó? ¿Y si realmente usurpó? De ninguna manera sería para robar.. ¡¿Robarle a Riri?! ¡ERA ABSURDO! Existía algún otro motivo, eso era seguro.
Durante la comida en un restaurante, Seung decidió que buscaría ese mismo día a Kang.
- Te he dicho que ya fui a todos los apartamentos, he llamado a sus conocidos y amigos. No está, ha desaparecido.
- Está aquí, eso es seguro.
- Choi SeungHyun… te he dicho que ya lo busqué, que ya interrogué a medio mundo. Además todos los autos están aparcados en sus lugares de siempre desde semanas.
- Llámame loco, pero Baby… creo saber dónde está.
- Loco, eres un loco. –Ji soltó mientras desviaba la mirada, estaban agotados. La vibración del móvil le atrajo la atención, sí, era un mensaje de Bae, acababa de contarle todo y este comenzaba a hilar porque YoungBae era más sereno para esas cosas.
Pagó la cuenta y se marcharon, Ji esperó a que su prometido se pusiera el cinturón de seguridad en el asiento del copiloto antes de preguntar.
- Bien, ¿A dónde nos dirigimos, capitán?
- Al apartamento de DaeSung.
- ¿Al de él?
- Sí.
Kwon encendió el vehículo, dirigió la unidad motora en dirección a ese lugar.
- Lo conozco, Baby. Él sería incapaz de esconderse en el apartamento de panda, es sagrado. Tampoco iría al que compartieron ambos porque es mucho más sagrado. Él cruzó la línea, debe estar completamente fuera de sí… él tiende a destruir cosas para descargar los sentimientos. Así que ahí está.
- Si tú lo dices. –Ji se negó a rebatir lo dicho por el mayor y se dedicó a conducir.
Una vez en la unidad residencial, el guardia de la privada les dijo que no había nadie en esa casa puesto que ni el personal de limpieza ha ido en semanas. Han tocado el timbre, han llamado sin resultados… inclusive las alarmas y cámaras de seguridad están activadas como cuando los habitantes salen de viaje.
Continuaron a pesar de las advertencias, Seung tenía esa mirada que indica que no desistirá de su idea. Si él cree que el menor se encuentra ahí, no se detendrá hasta que le demuestren lo contrario.
Aparcaron el auto, el mayor se le adelantó, pasó la barda y fue hasta la puerta donde comenzó a tocarla fuertemente seguido de roncos gritos.
“¡DaeSung-ah, abre la puerta!” “¡DaeSung-ah, sé que estás ahí!” “¡DaeSung-ah, abre la puerta!”
- ¡¿P-PERO QUÉ DEMONIOS, DAE-AH?! –Kwon exclamó una vez que les abrió la puerta, ingresaron a la morada.
¡Él de verdad estuvo escondiéndose en su apartamento! ¡Era verdad lo de destruir cosas! Debía darle puntos a su prometido.
- Dae-ah... –La mirada de honesta preocupación en su prometido le dolió- Dae… mírate.
- ¿Cómo está él…? –Les cortó. Lucía desaliñado, sucio, con los ojos enrojecidos, la barba crecida.
- Él está igual que siempre… sigue sin responder. Bae y DongWook están en el hospital. Todos los días nos llaman cinco veces. –Choi respondió.- ¡El que nos preocupa eres tú!
- Estoy bien. –Les dio la espalda.
- Esto, es más grave de lo que pensaba. –Ji comenzó a remover las botellas en el suelo, unas estaban rotas, otras simplemente tiradas en el suelo.- Has bebido demasiado.
- Dae, escúchame bien… tienes que reponerte. –El actor comenzó.
- Solo váyanse, no quiero hablar con nadie, no quiero verlos. Solo me interesa saber noticias de SeungHyun-ee… lo demás no me importa. Por mí, que el mundo se vaya a la mierda.
Un puñetazo limpio estrelló en el rostro de Kang, inevitablemente cayó al suelo… JiYong estaba rojo del coraje, estaba furioso y dolido. ¿Dónde quedaban los esfuerzos de ellos? ¿El sacrificio de SeungHyun?
- ¡YA BASTA KANG DAESUNG! ¡¿CÓMO PUEDES SER TAN CRUEL CON SEUNG?! ¡¿SABES QUÉ ÉL TIENE FILMACIONES?! ¡APENAS HA DORMIDO UNA MALDITA HORA! ¡VINO DESDE EL OTRO LADO DEL PAÍS SOLO PORQUE ESTÁ MORTIFICADO POR TI! ¡TODOS ESTAMOS PREOCUPADOS POR TI! ¡ERES UN ESTÚPIDO EGOÍSTA! ¡CREES QUÉ SOLO TÚ SUFRES! ¡¿CREES QUE NO NOS DUELE VER A RI-AH EN ESE ESTADO?! ¡AHORA NOS HEMOS ENTERADO QUE DESPEDISTE A TU ABOGADO! ¡YA SABEMOS LO DE LA DEMANDA! ¡TIENES QUE DEFENDERTE! PERO NO… SOLO ESTÁS AQUÍ, PUDRIENDOTE EN TU CULPABILIDAD. ¡IDIOTA, TAMBIÉN TE QUEREMOS! ¡NOS DUELE MUCHO VERTE TAN DERROTADO! –Calló súbitamente, la voz se quebró y comenzó a llorar de coraje, de desesperación, de miedo… ¡Todo era una maldito caos! ¡Era un estúpido! ¡¿Por qué no entendía que lo que uno le pasara afectaba a todos?!
- … -Pero Kang no se conmovió en absoluto, solo lo miró y lo miró. Fue a la vitrina para tomar otra botella. Entonces, el cuerpo de Choi se interpuso.
- Eres mi mejor amigo, no… eres mi hermano. Y me duele mucho verte así, yo le prometí a Seungie que cuidaría de ti. Esa promesa lo hice la primera vez que fuimos a ese hospital. Yo cumplo mis promesas… hasta que él no se recupere, te cuidaré. Estoy seguro que harías lo mismo si algo le pasara a alguno de nosotros. Déjanos ayudarte. -El mayor fue honesto y sincero. Kang no habló, pero entonces fue hasta un sillón y se sentó.
- DaeSeungie… h-hemos hablado con tu asistente porque habías desaparecido. Ella nos entregó los documentos ¿Por qué no los revisaste? Dae, tenías una cita para una audiencia hace una semana pero como no fuiste, se levantó una orden… La hermana menor de Ri-ah te está demandando por falsificación de documentos, usurpación y fraude… Dae, no nos has dicho NADA de esto. Queremos ayudarte pero tienes que confiar en nosotros. Tenemos contacto con los mejores abogados pero han pasado tres días en lo que estuviste aquí. No has dicho y hecho nada… tu tiempo para desestimar la acusación se va a agotar ¿No planeas defenderte? –Kwon se calmó solo porque su prometido le dedicó una mirada de súplica. Hizo todo su apego a la poca paciencia que tenía.
- … -Silencio. Aquello era lo más desesperante.
- Dae-ah… ¿Escuchaste a Ji? Aún tienes 27 días para defenderte, antes de que el tribunal considere tu silencio como admisión de los hechos y dé una sentencia sin juicio. –Choi al ver la pasividad del otro, comenzó a desesperarse.- ¡¿DAESUNG, PIENSAS IR A LA CÁRCEL?! ¡Eso no va servir de nada para que Ri-ah despierte! ¡Solo lo vas a complicar más! ¡¿Sabes qué puede pasar si ocurre aquello?! ¡No solo irás a la cárcel, también derrumbarás a la Agencia que tienen! ¡Hana nos prohibirá verlo! ¡¿Entiendes?! ¡Ella no nos dejará verlo!
Kang los miró… luego regresó a su posición. Mientras, los mayores intercambiaban miradas, esto era insostenible.
- Dae-ah… dime ¿Es verdad? Lo que dijo Hana. –Cuestionó Choi.- ¿De verdad falsificaste? ¿De verdad hiciste todo eso? ¿Es verdad que no dejas que la Familia de Seungie lo vea?
- Confía en nosotros. –JiYong se acercó, inclinándose para darle a entender que no estaba solo.- Por favor, dinos la verdad. Nosotros no sabemos nada… y es probable que nos demanden a nosotros también por ser cómplices.
Pero Kang solo bajó la mirada, no hablaba… pasaron minutos en que nadie dijo nada.
- Hana podrá enviarme a la cárcel… pero JAMÁS se acercará a Seungie. –Soltó de repente.
- ¿Qué estás diciendo? ¿Por qué hay tanto odio entre ustedes? – JiYong continuó, ahora que estaba hablando era la oportunidad. Más sin embargo, por algún motivo desconocido esas palabras no soban a nada bueno.
- Es realmente bonito. Seungie tenía unos… pero muy simples y sencillos, no eran de marca ni mucho menos lujosos… él los tenía, los descubrí entre sus cosas. –Señaló su colgante Cartier, dirigió su mirada a su anillo-dije y sonrió débilmente.- Él no pensaba abandonarme… al contrario, quería borrar todas mis dudas e inseguridades.
Frunció el ceño, los ojos se le llenaron de lágrimas… empujó a Kwon que casi cae, y ante la mirada atónita de los dos… comenzó a destrozar lo que veía a su paso: los muebles, los adornos, las pinturas… la mesita de cristal, las lámparas fueron azotadas, el estante de libros fue derribado.
- ¡PERO LO ARRUINÉ! ¡LO ARRUINÉ! ¡SIEMPRE LO HAGO! ¡ESTOY MALDITO! ¡ES MI CULPA! ¡SI HUBIERA COMFIADO MÁS EN ÉL! ¡SÍ HUBIERA INVESTIGADO MEJOR EN LUGAR DE ESTAR INVENTANDO HISTORIAS ABSURDAS! ¡SÍ EN VERDAD ME HUBIERA PREOCUPADO POR ÉL! ¡SÍ HUBIERA TOMADO SUS RECHAZOS DE MANERA MÁS SENSATA! PERO NO, YO SIEMPRE PENSANDO QUE VA A LASTIMARME, YO SIEMPRE CREYENDO QUE ME IBA A DEJAR… ¡¿SABEN POR QUÉ?! –Se volvió a mirarlos, las lágrimas descendían.- Porque siempre lo he sabido. Yo no soy la persona perfecta para él. Yo, no lo merezco.
- Dae… -JiYong comenzó a llorar comprendiendo un poco ese dolor; el mismo terror de no merecer a quién se ama, lo detuvo antes de diera un puñetazo a la vitrina de cristal.- No es cierto, no es cierto… ¡Tú eres el único que lo hubiera querido mejor! ¡Solo tú! ¡Porque ahora estás muriéndote de tristeza! ¡Haz soportado esto tú solo! ¡Tú solo lo buscaste! ¡Tú solo te has encargado de cuidarlo! ¡Seungie, te eligió a ti!
- Yo solo destruyo todo lo que toco… yo destruí a Seungie. –Se dejó abrazar, y cuando Choi se unió dejó fluir toda su tristeza, su culpabilidad, su dolor, su desesperación, su terror, su frustración y su impotencia.- Solo quiero que despierte, no importa si no lo vuelvo a ver… solo quiero que despierte y sea feliz. Qué viva… le quité a su familia, le lastimé… no lo merezco.
Era una culpabilidad inmensa, era un sufrimiento que no imaginaban que estuvo albergado en esa alma. Así como también se develaba un pasado oscuro, algo que el propio Ri-ah le omitió. ¿Era posible que…?
- No es cierto. Tú eres la persona perfecta para él. Son el uno para el otro. ¡Lucha por él, Dae! –Su prometido hacía todo por controlarse, ver así a su mejor amigo dolía, pero estaba bien, que liberara lo que corazón escondía.- No importa lo que digan, nosotros estamos a tu lado. Siempre estaremos a tu lado, así que por favor. Déjanos ayudarte, hazlo por Seung-ee.
Nuevamente, silencio…
- Dae… -Intentó hacerle responder, pero el menor no dijo nada. Suavemente le soltaron… DaeSung caminó en dirección a una habitación. Los dos mayores lo siguieron.
Era un despacho, estaba un poco mejor que el resto del apartamento. Se detuvo, y miró un cuadro en la pared. Choi entendió primero, fue y quitó el cuadro, detrás de este estaba una caja fuerte con un tablero electrónico.
- 90121289 –Susurró roncamente. Acto seguido el mayor tecleó y la puerta cedió.
- Voy por una toalla, estás todo empapado. –Kwon anunció, desapareció.
Se internó en los pasillos, la estancia estaba hecha un desastre, suprimió un gemido de sorpresa al ver la destrucción de la alcoba principal, con sumo cuidado se desplazó en busca en la ropa limpia, y encontró la prenda. Al salir se detuvo un momento, ahí, en la cama, el objeto intacto era una imagen de Ri en su época de BIGBANG. Los ojos se le llenaron de lágrimas, de hecho derramó un par… nuevamente sentía las manos temblar, un ataque de ansiedad.
- Ahora, no. Por favor. –Cerró los ojos obligándose a controlarse. Dejó pasar unos momentos, respiró profundamente.
- La prensa amarillista se encargó de que nadie creyera en el buen juicio de las autoridades. Seung-ah salió libre bajo fianza, pagó los daños a la propiedad pública… las pruebas que se le hicieron ese día fueron diez ¿Sabes por qué? –De regreso escuchó la voz de Kang, JiYong entró sin entender lo que ocurría.- Los resultados fueron Negativos. No estaba ebrio en el momento del accidente, no estaba drogado…
Vio al actor con una carpeta en manos, absorto en lo que fuera que había.
- Sin embargo, a la prensa no les importó. Comenzaron a salir rumores sobre soborno. Y él no los desmintió… Seung-ee no dijo nada y cuando le preguntaban solo reía.
Ji miró a Choi extrañado, buscando una explicación, el mayor mostró la página del diario donde pudo leer: “Lee SeungHyun, ex miembro de BIGBANG chocó su Jaguar estando ebrio.”
Obvio que el ahora productor, recordaba ese escándalo, fue una sensación por meses… recordó inclusive que lo buscó para regañarle fuertemente por su falta de prudencia.
- FLASH BACK –
- ¡Felicidades, genio! ¡Estás en todos los diarios de Corea del Sur! –Fue lo primero que dijo en cuanto el menor atendió su llamada.
- También me alegra escucharte, Hyung. –El otro contra atacó.- No sé de qué te preocupas, no estoy afectando tu carrera, sino la mía.
- ¡ESCUCHÁME IDIOTA! ME PREOCUPÉ. PENSÉ QUE HABÍAS SALIDO HERIDO. PERO NO, TAN SOLO FUERON TUS NEURONAS. ¡¿HASTA CUANDO VAS A MADURAR?! YA NO ERES UN ADOLESCENTE COMO PARA QUE ANDES CON ESAS TONTERÍAS. ¡MÁS TE VALE TENER CUIDADO O ME ORILLARÁS A QUE TE HAGA SENTIR MI FURIA!
- Gracias, hyung. –Aquella voz suave le desconcertó.- Muchas gracias por todo, hyung… lamento las molestias. Te has tomado el tiempo para llamarme. Todo está bien, no hubo heridos ni nada. Voy al hospital a hacerme unas pruebas.
- Panda, idiota. –En el fondo no podía estar mucho tiempo enojado con el maknae.- Cuídate, mucho.
- Lo intentaré, hyung.
- FIN DEL FLASH BACK -
- Yo estaba en Japón… me regresé angustiado cuando me enteré. Él estaba en casa cuando lo encontré. Ni siquiera hizo algo para hacerme cambiar de parecer… me pidió perdón. –Comenzó a golpear la pared sin descanso hasta que la sangre fue brotando.- ¡LO REGAÑÉ! ¡DISCUTIMOS! ¡ME ENOJÉ MUCHO POR SU ESCÁNDALO! ¡LO CULPÉ DE LA PÉRDIDA DE PUNTOS EN LAS ACCIONES DE NUESTRA COMPAÑÍA! ¡SI ME HUBIERA CALMADO! ¡SI HUBIERA INVESTIGADO! ¡SI HUBIERA PREGUNTADO!
Kwon se tensó… fue con Kang sin pensarlo para calmarlo.
- ¡SÍ LO HUBIERA SABIDO ANTES! ¡SÍ HUBIERA DESCUBIERTO ESE EXPEDIENTE ANTES! ¡ESTO NO HUBIERA OCURRIDO! ¡NADA DE ESTO ESTARÍA PASANDO! ¡Y SEUNGIE ESTARÍA BIEN! ¡YO ME HUBIERA ENCARGADO DE CUIDARLO! ¡HABRÍA ESTADO A SU LADO EN ESOS MOMENTOS DIFÍCILES! Yo hubiera hecho todo porque se recuperara.
JiYong entendía cada vez menos. ¿Qué era a lo que se refería con Riri? ¡QUERÍA SABER! Pero tan solo se conformó con estar a lado del menor.
- Lo hizo en secreto. De hecho ese expediente lo encontré escondido ¿Por qué no me lo dijo? No lo sé… pero duele pensar que estuvo solo padeciendo todo. ¡Yo hubiera estado a su lado! ¡Lo hubiera dejado todo por él!
- DaeSung… -El mayor dejó expediente en el escritorio. Atrapó con fuerza al menor para detener el daño que ocasionaba, sabía Ji no entendía del todo pero no hizo preguntas, la conexión especial con Choi le permitió hacerse una idea. Una mentira más que descubrieron de Lee.- ¡Esto también nos afecta a todos! ¡Nosotros estábamos igual que tú! ¡Pero no es momento de caernos en pedazos! ¡Tienes qué luchar! ¡Tienes que recuperarte! ¡No estás solo! ¡Nos tienes a todos!
- Por favor… Dae-ah, permítenos compartir tu dolor, y tus lágrimas. –Se tragó las lágrimas, tenían que ayudar a Kang, tenían que estar juntos.- ¿Qué pasó cuando supiste que Ri-ah estaba en coma?
- Él no había dejado nada en regla… -Finalmente respondió a una de sus preguntas, aunque entonces se quedó callado, tuvieron que esperar nuevamente.- No había hecho testamento, no tenía apoderados legales porque todo lo hacía él solo, y luego su caída ocurrió tan repentinamente…
Ni siquiera el accidente de 2011 se comparaba con el daño que llevaba en el alma en esos momentos. Una oscura mezcla de odio y tristeza se dejó ver, en esas palabras rasposas, junto a esa mirada que estaba cegada de sufrimiento.
- Solo hice lo que tenía que hacer.
Dejaron a Daesung solo, no sin antes les jurara cumplir unas condiciones sobre protectoras. Había sido suficiente por ese día. Habían llegado a los límites, les contó gran parte de la historia, debían dejarle descansar. Era poco más de la media noche.
La radio era lo único que se escuchaba mientras iban a su hogar.
- No te preocupes, Baby… ya veremos cómo salir de esta.
- No lo culpo, yo sería capaz de matar por ti, sin arrepentirme. –Soltó de repente.
- Hey… no me gustaría saber que eres un asesino.
- Yo moriría y mataría por ti. Comprendo la situación de los dos.. son un par de idiotas, se merecen el uno al otro. –La vista se le nubló, paró en cerca de la acera de la calle.- Por un lado, está Panda… ver los resultados de ese estudio médico, saber que la vida de repente se le acortó, qué podría morir en cualquier momento. Si yo estuviera en su lugar hubiera hecho lo mismo. Te lo hubiera ocultado para que no estuvieras triste, para no tener tu mirada dolorosa, para no verte sufrir, y aunque esté muriendo te regalaría una sonrisa para que llevaras ese recuerdo de mí. Por otra parte… si fuese al revés, yo cometería cada error, yo enloquecería por no tenerte a mi lado. Yo también hubiera llegado a esos extremos.
- Pero no estarías solo, mi familia te habría apoyado… porque saben que te amo, porque saben que esa sería mi voluntad. –SeungHyun limpió las lágrimas que se deslizaban lentamente por las mejillas del menor.
Le miró angustiado… ¡¿Por qué ese terror?!¡¿Por qué de nuevo sentía que SeungHyun se desvanecería de su vista?! Su cuerpo fue preso de un temblor que le fue imposible controlar, la respiración se agitó. Entonces, ya no le pudo ocultar su estado al actor.
- Ji… JiYong… -Estaba preocupándolo, pero no podía detenerse.- Baby…
Quiso decir algo pero su voz se apagó, solamente podía jadear dolorosamente.
- ¡Mierda! JiYong… ¿Qué tienes? ¡Ji!
Intentó comunicarle que solo tenía miedo y un ataque de ansiedad, pero era imposible, el cuerpo no respondía a las órdenes dictadas desde el cerebro.
- ¡JiYong! –Vio como se sacaba el cinturón de seguridad.- Ji…¡No te duermas! ¡Ji!
Sus ojos se sintieron pesados.
Despertó, lo primero que observó fue un techo blanco con una lámpara que lastimó sus ojos, al girarse su mano derecha con la intravenosa, la izquierda estaba prisionera de la cálida mano de SeungHyun. Mordió sus labios para contener un gemido de frustración, no había querido que el actor viera su pequeña crisis emocional. Al menos él lo consideraba así, una crisis emocional por todo lo que estaba padeciendo. No obstante, no era el único que estaba viviendo bajo ese mismo estrés, Seung lo vivía a su lado por ejemplo. No, Gdragon debía dejarse de niñerías y ser fuerte para todos; para Seung, para Daesung, para Panda, para YoungBae y DongWook.
Para él mismo. Ser un pilar, un compañero, un hermano. Ser fuerte ante la adversidad… aunque, pensar en que algo malo le sucediera a SeungHyun le derrumbaba.
- Baby…¡Despertaste! ¿Cómo te sientes? Llamaré al doctor. –Choi se incorporó demostrando que había dejado de dormir, estaba alerta.
Ji sintió pena por él, tantos problemas que debían sobrellevar.
- No te preocupes, ya me siento mejor. Creo que necesitaba dormir. –Apretó el agarre. Hizo un puchero para alivianar el asunto, pero no funcionó.
- Tienes principios de Anemia. –Sentenció con voz severa.- No has dormido bien, no has comido adecuadamente, además… tienes una intoxicación por cafeína.
- Lo siento, tenía mucho trabajo… quizás abusé del café y energizantes.
- Me diste un susto de muerte, Kwon... no tienes idea de lo que me hiciste sufrir. –No, no lo sabía, pero podía verlo, en esos ojos ojeroso, rojos de tanto llorar.- Creí que te perdía.
Alzó la mano para acariciar el rostro que tenía la barba crecida.
- De verdad, ya me siento muy bien. Estoy descansado. En cambio, tú necesitas dormir…
- No te quiero perder. No quiero que te vayas sin mí. Moriremos juntos ¿De acuerdo?
Aquella pregunta provocó efectos contrariados pero de misma intensidad; Incredulidad, es decir ¿Cómo prometer algo de lo único que no se tiene seguro? No era una opción morir a su lado o solo, cuando el ángel de la muerte te caza es inevitable; Dolor, odiaba esa palabra, “muerte”, no quería siquiera pensar en ello, de hecho esa había sido la razón por la cual sufrió la crisis.
- Haré lo que pueda, pero no te prometo nada. –Sonrió.
- Al menos espera hasta que nos casemos. Déjame tener la dicha de ser tu esposo. –Aquel ruego le dejó un escalofrío al corazón.
Sonrió como el dolor en el alma se lo permitió.
Marcaba las 11:15am cuando finalmente le dejaron salir del hospital. Recibió los medicamentos y todas las recomendaciones del doctor. SeungHyun le hizo jurar que las seguiría al pie de la letra.
El viento acariciaba su rostro, fue tan sanador. Respiraba gozando cada bocanada. Estaba feliz de estar nuevamente vivo.
- Debo tomar mi vuelo. Prometo regresar pronto. –Choi dijo llegando a su apartamento y lo recostaba.- No olvides tomar tus medicamentos, te quiero vivo.
- No te preocupes, intentaré no morir.
- Hablo en serio Kwon JiYong.
- Yo también.
Un beso casto que le dejó insatisfecho. Necesitaba de más… lo necesitaba por completo.
- Buen viaje, tortuga.
- Te Amo, Ji. –Lo estrechó por última vez antes de marcharse.
Nuevamente se quedó solo.
Las llamadas diarias eran su razón para continuar, escuchar su voz. Su recuperación fue rápida gracias el descanso que Yang le brindó cuando se enteró de su colapso.
De vez en vez llamaba a DaeSung para verificar que tampoco hubiera intentado quitarse la vida. Bae le llegó sorpresivamente, DongWook le había traído consigo en lo que arreglaba el asunto de su divorcio. La presencia de su mejor amigo tuvo un efecto positivo tanto a su estado de salud como de ánimo. No le comentó sus paranoias, ¿Era justo tener que agobiarle con eso cuando está claro que se encuentra ansioso por la terminación del divorcio del hombre que más ama?
Se conformaba con solo disfrutar de su compañía, de la que gozó hasta que el actor regresó.
- Ahora sí, soy todo tuyo y tú eres todo mío. –Había dicho cuando llegó a su apartamento, llevaba una maleta pequeña que indicaba que planeaba vivir bajo su mismo techo.
No repeló porque de verdad adoraba la idea.
Los tres visitaban a Daesung; Seung, Bae y él… el menor se encontraba menos aprehensivo aunque ver la presencia de Bae no le pareció… ¿Quién estaba al pendiente de Ri-ah en USA? Por más que intentaran hacerle entender que los médicos les mantenían informados, no cambió su semblante severo hasta pasada una semana. Accedió con un poco de incomodidad a que el abogado de confianza Shin llevara su caso, rápidamente se preparó la defensa.
Lo primero era obtener la libertad de viajar a USA, y posteriormente llegar a un acuerdo con la parte acusadora.
Las cosas estaban marchando bien, a su debido tiempo, pero al menos estaban yendo.
Regresó a su ritmo de vida agitado, a las composiciones, a las grabaciones de última hora, a la entrega de demos, a reuniones… de vuelta al ruedo.
Sin embargo, esa mañana no había querido salir de casa. Atribuía eso a que tener a Seung bajo el mismo techo, despertar a su lado le estaba mal acostumbrando. Le tomaba tiempo dejar la cama.
Desayunaron juntos, entre sonrisas… si así sería su vida de casados, encantados querían que el tiempo corriera. Se despidieron con los mismos gestos románticos; un beso, manos entrelazadas, mirada furtiva.
Fue el día más largo. Pronto comenzaría el come back, pronto el período de las promociones llegaría, debían tener listas las carátulas tanto del formato digital como del físico; habían planeado que las dos versiones no llevaran las mismas canciones.
Los teasers no estaban listos, en fin… muchos detalles.
Eran la 11:45pm cuando el móvil vibró de manera insistente. Odiaba que interrumpieran su concentración en el estudio. Pero intrigado por la cantidad de veces, respondió.
Todo fue en cámara lenta…
En la pantalla la foto de YoungBae resplandecía.
Oprimió el botón para contestar.
Escuchó atentamente…
El móvil cayó…
Las lágrimas brotaron irremediablemente.
Ese dolor en el alma, esa angustia que tanto le había aquejado… todo tenía sentido ahora. Algo dentro de él se rompió, una aterradora voz interna recriminó <<Te lo dije, ustedes nunca serán felices, ustedes no pueden estar juntos. >>
Después todo fue muy rápido.
JiYong recuperó el móvil.
JiYong salió sin importarle en lo más mínimo al artista dentro de la cabina.
JiYong comenzó a correr como si su alma dependiera de eso.
JiYong abordó desesperadamente su vehículo sin ponerse el cinturón de seguridad.
JiYong salió a toda marcha… las lágrimas empañaban su vista.
Solo quería llegar pronto. Quería estar ahí en esos instantes; con él, tomando su mano.
En su mente aún resonaban las palabras de YoungBae que poco a poco se asemejaban a una lúgubre voz de ultratumba, una voz que le dictaba su condena por querer desafiar al destino.
“SeungHyun está en el Hospital General de Seúl, su estado es grave… él recibió un disparo. Lo siento mucho, JiYong.”
Continuará…
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NOTAS DEL AUTOR:
Hola! *u*/! Después de largos meses sin actualizar este FFic... Finalmente ha terminado su espera... el CAPÍTULO 12! -avienta confeti y suenan las trompetas-
Espero que sea de su completo agrado, sino lo es... pues ni modo, así lo escribí y ya lo publiqué.
¿Cómo han estado? Espero que bien, cuidense mucho por favor. No enfermen como yo, que tengo infeccion de garganta, una angina inflamada, gripe... en fin estoy a punto de morir.
Pasé una noche de perros, ayudando a mamá a subir sus calificaciones y observaciones al sistema escolar público...además la hice de maestra atendiendo su grupo... ¡llegamos a casa a las 2:30am! TTwTT odio estos días.
En fin... el ciclo escolar está por terminar, fue lindo estar con el grupo que atiendo.. -no, el de mamá no- ¿Qué depara más adelante? No tengo idea, ya estoy buscando un trabajo, entre los informales, y formales... pero ninguno ha llamado todavía... no money... TT~TT
Bueno, mucho bla, bla....
MUCHAS MUCHAS GRACIAS POR CONTINUAR LEYENDO ESTE FIC!!! MUCHAS GRACIAS.
Espero continuar siendo de su agrado en el futuro.. sino es así, me da gusto haberles gustado en este FFic. ^^
Por favor, no olviden dejar comentarios, dejen su humilde donación a la FUNDACIÓN ANNIS TORRES LYTON.
Les Quiero.
Nos Leemos PRONTO!
^^
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Muchas Gracias por visitarme, y Vuelve Pronto!!!
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